El cambio climático encabeza la lista de los problemas medioambientales a los que se enfrenta el mundo actual; para evitar un deterioro grave del planeta, es imprescindible reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en todas las regiones, en todo el mundo. Gracias al esfuerzo continuo de investigación y desarrollo, la industria química ofrece soluciones nuevas para ahorrar energía y reducir las emisiones de gases de efecto invernadero.
Los gases de efecto invernadero - como el dióxido de carbono, el metano y los óxidos nitrosos - representan algunos de los factores principales responsables del cambio climático. Desde el comienzo de la revolución industrial, su aumento ha sido imparable a causa de la actividad humana, con su combustión de carburantes fósiles, el uso de las tierras y la agricultura.
A mayor crecimiento de estos factores, más crecerá el nivel de energía y las emisiones liberadas a la atmósfera. Un uso menor de energía supone menor combustión de carburante fosil, menor emisión de CO2 y menos consecuencias negativas en el cambio climático.
La industria química se esfuerza en mejorar la eficiencia energética
La industria química es un sector productivo para la energía, con un 9% aproximado del coste de la producción total de la energía a escala mundial. A lo largo de las últimas décadas, la industria química ha invertido mucho en mejorar la eficiencia energética y fruto de sus esfuerzos en reducir el gasto ha sido una mejora del consumo energético específico de un 30% aproximadamente desde 1990.
La industria química es necesaria entonces para alcanzar los objetivos del desarrollo sostenible en la lucha contra el cambio climático. Por ejemplo, los productos petroquímicos cuentan menos de un 6% de la producción total del petróleo y son materiales imprescindibles en la obtención de soluciones para el ahorro de energía y la reducción de la emisión de gases de efecto invernadero. Las innovaciones petroquímicas han contribuido también a numerosos sectores intermedios como el del vestido, los ordenadores, el papel, la vivienda y el transporte.
¿Cómo ayuda la petroquímica a reducir el gasto de energía en el hogar?
Hoy en día, el 75% del calor interior de los edificios se escapa por las paredes externas; el uso de espumas y materiales aislantes de alto rendimiento puede reducir los costes de energía hasta un 60%.
En la cocina, los films de plástico transparente y ligero mantienen los alimentos frescos por más tiempo y ahorran energía en el transporte. Los embalajes de plástico moderno sirven para ahorrar unas 42.600.000 toneladas de CO2 al año en Europa.
Una nevera es una pieza indispensable de la cocina; el consumo de energía de las neveras se ha reducido en un 15% durante los últimos 15 años, en parte gracias a las mejoras en el aislamiento con las espumas de poliuretano rígidas.
La mayoría de los adolescentes de hoy tienen ordenadores; la tecnología de la corrección digital del factor energético, que permiten los chips modernos, gracias a los productos químicos, contribuye a reducir el consumo de energía de los ordenadores y a limitar también las huellas de carbono. Lo mismo ocurre con la energía eléctrica, donde se puede ahorrar hasta un 70% de energía utilizando bombillas fluorescentes en lugar de las bombillas tradicionales.
La petroquímica hace que los automóviles sean un 30-50% más ligeros, gracias a los nuevos materiales que reducen el peso de las piezas automotoras. Se han desarrollado unos plásticos nuevos en poliamida (nylon) para los coches que sustituyen a los metales. Además, una nueva generación de neumáticos que contienen soluciones químicas en su composición reducen el consumo de combustible hasta un 8%.
Energía sostenible gracias a la petroquímica
Incluso la propia energía eólica se beneficia de la petroquímica. Se añade un compuesto acílico a los adhesivos utilizados para garantizar el ensamblaje de las aspas de las turbinas para modificar su resistencia; y se utilizan también resinas epoxi en la fabricación de las aspas de rotor para que las turbinas eólicas sean cada vez más eficientes. A corto plazo, la energía eólica es la más económica de Europa.
Estos ejemplos demuestran que la industria petroquímica resulta imprescindible en la fabricación de materiales para el futuro de los jóvenes y es un elemento innovador que beneficia el medioambiente. La cuestión del cambio climático nos obliga a invertir en nuevas soluciones para los problemas de la vida cotidiana. La química desempeña un papel preponderante en este proceso innovador.
Blog de cursos y estudiantes de Químicas del Departamento de Ciencias Quimico-Biológicas en la Universidad de las Américas Puebla.
Subscribe to:
Post Comments (Atom)
NEODIMIO ¡no te lo pierdas!
-
De entre todos los compuestos químicos que existen, quizá sean los llamados compuestos de coordinación los que mayores dificultades ofrecen ...
-
Básicamente el video habla por sí sólo. Se tiene una cerveza fría líquida recién sacada del refrigerador o congelador, se le da un golpe y e...
No comments:
Post a Comment